17.06.2017
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Y me proponen la muerte… es una columna que se propone correr el velo del estigma de ser un pibe villero. A la muerte que nos destinan, arte para combatirla.
La pintura para mí es un momento de reflexión, de vómito y relajación. Allí expreso con mucha furia todo el dolor que tengo guardado desde que nací; todo lo que me tocó ver y vivir a lo largo de los años en la villa. Cada trazo, cada tono de color, lo hago expresando el dolor de mi mamá presa, el dolor de mis hermanos de la villa que están vivos pero que se rompen el lomo todos los días para traer dos miserables pesos, y sin olvidar mis hermanos caídos. Pintar es también hermoso; me trae tranquilidad y paz, y en cada trazo sueño con un mundo mejor.
Llovía. Esa tarde gris miré una película estadounidense sobre la vida y obra de Van Gogh: «El loco de pelo rojo». Me llamó la atención una escena cuando Van Gogh está pintando bajo la lluvia, junto a su amigo Paul Gauguin. Discutían si era o no necesario quedarse a pintar bajo la lluvia y captar ese momento sagrado. Eso me inspiró a capturar los ruidos particulares y olores que trae la lluvia a la villa; las transformé en pintura.
Todas las pinturas están a la venta. Para más info: mensaje privado por Facebook
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