14.07.2016
Por Irene Caselli
Los argentinos se pueden considerar afortunados por poder ver «Historias Napolitanas» en los cines: tras el gran éxito en su estreno en el último Festival de Cine de Venecia, esta película italiana ha vivido en una especie de limbo en su país de origen por falta de distribución local. Es el resultado de la dirección independiente de Antonio Capuano, un veterano del cine napolitano. Nacido en 1940, estrenó en Venecia hace 25 años con Vito y los otros, una dura película sobre los niños callejeros de Nápoles, que se considera como el arranque de la “nueva ola” de cine napolitano de los 90, cuyo heredero es Paolo Sorrentino, que ganó el Oscar en 2014 con La Grande Belleza. En 1999, Capuano co-guionó con Sorrentino Polvo de Nápoles. Y ahora suma un nuevo capítulo a su producción sobre la ciudad en la que nació.
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En tres fragmentos, la película cuenta las vidas de tres generaciones en Bagnoli, un barrio popular de la ciudad de Nápoles. Sus historias se cruzan en frente de las ruinas de la fábrica siderúrgica Italsider, el símbolo del abandono y de la marginalidad del barrio.
Giggino es un cincuentón, en crisis con su familia, que se dedica a robar lo que encuentra en autos estacionados, y de vez en cuando se gana algunas monedas leyendo en restaurantes un poema suyo (que siempre es el mismo). Se pasa el día corriendo de un lado a otro, casi escapando de su realidad, y a la noche va a dormir en el departamento de su padre.
Antonio tiene ochenta años y es un jubilado de la Italsider, nostálgico de los tiempos de gloria del barrio.
El actor Luigi Attrice. Foto: cortesía del director
Acepta a su hijo (Giggino) de mala gana y se distrae con Olena, la ucrania que lo ayuda en la casa. Además, atesora una reliquia: una camiseta que Diego Maradona usó durante sus míticos años en el Napoli.
Marco tiene dieciocho años y trabaja como repartidor en un almacén de barrio. Así descubre muchos mundos, como la casa de Antonio, a la que va todos los días, insistiendo en probarse la camiseta.
Historias Napolitanas es una película incómoda. Molestan sus encuadres provocadores y grotescos, como cuando la cámara nos acerca a la boca de Giggino mientras está masticando su almuerzo. Molestan las tomas con cámara en mano que casi marean al espectador.
Las imágenes molestan y provocan a los espectadores, tal como buscó Capuano, que a su vez hizo de director de fotografía. “Esta película fue prácticamente autoproducida, con un presupuesto limitado. Aunque fuera un largometraje de ficción, lo trabajamos con plena libertad creativa, como si fuera un corto”, comenta a Pucheronews Emanuele Donadio, asistente de dirección.
Antonio Capuano en pleno rodaje. Foto: Emanuele Donadio
“Esta manera de trabajar de Antonio responde a una exigencia precisa suya, a una visión estética y a un lenguaje cinematográfico que Antonio busca constantemente. Antonio no busca encuadres bellos, no quiere una película que complazca a los espectadores. Va obstinadamente en dirección contraria a los demás”, añade.
Capuano elige actores primerizos o de teatro, y se toma algunas libertades. Como con el gran Antonio Casagrande (Antonio): cuando habla, se escucha un aplauso como cortina de fondo, como para recordar su destacada trayectoria sobre tablas. También mezcla la ficción con el documental, utilizando varias escenas reales, como la marcha del 1 de mayo que cierra la película.
Nápoles aparece en su costado más oscuro: violencia, suciedad, desesperación y pobreza. Pero también aparece parte de su cara más atractiva: ironía, poesía, fútbol, pasión y el inconfundible azul del Mediterráneo. La combinación de estos elementos parece funcionar en Buenos Aires.
“La reacción del público en Buenos Aires fue sorprendente. Participaban de todo corazón a la proyección de la película, se reían abiertamente”, dice Donadio, que asistió a la premiere de la película en Argentina el mes pasado. “Los napolitanos y los porteños somos pueblos que necesitamos crear héroes populares, personajes shakespearianos. Es algo nuestro, latino. Maradona es un paradigma perfecto de esta cosa profunda y compleja. Un paradigma que compartimos”.
El afiche de la película en Argentina.
FICHA TÉCNICA
Título en español: Historias Napolitanas (Bagnoli Jungle)
Año: 2015
Origen: Italia
Reparto: Antonio Casagrande como Antonio
Luigi Attrice como Giggino
Marco Grieco como Marco
Olena Kravtsova como Olena
Sarah Naomi Attanasio como Sara
La película se puede ver en el Buenos Aires Mon Amour: BAMA Cine Arte
Una selección de otras películas del director:
Vito y los otros (1991)
Pianese Nunzio, 14 años en mayo (1996)
La guerra de Mario (2005)
Trailer de «Historias Napolitanas»
