La patria de Cristina: ¿nosotros o el otro?
01.07.2015
Estamos en un año electoral, las calles están empapeladas con frases ideológicas, invadidas por volantes con propuestas políticas, proliferan las discusiones sobre las posiciones, los proyectos, la identidad nacional. Se generan interrogantes.
¿Qué nos dicen las consignas políticas? ¿Hay algo detrás de sus palabras o son vacías? ¿O simplemente son literales?
Puchero News entrevistó vía mail al sociólogo Luis Fanlo para consultarle por estas cuestiones.
“La tremenda despolitización de la sociedad argentina de estos años ha convertido las consignas políticas en eslóganes”.
En este artículo, nos centraremos en las frases del discurso kirchnerista que versan alrededor del sustantivo femenino patria.
En lo que refiere a derechos humanos, la consigna del gobierno es: TENEMOS PATRIA; a la política migratoria se la llama PATRIA GRANDE; en 2010 la presidenta proclamaba que LA PATRIA SOMOS TODOS y en 2013 transformó esta aseveración en LA PATRIA ES EL OTRO.
El otro y yo
Hace dos años, la presidenta de todas y todos lxs argentinxs pronunciaba en su característico estilo casual:
“La patria es el otro, es el que todavía no ha podido conseguir trabajo, o que consiguiendolo no está registrado (…) la patria es el que todavía trabaja y lucha para tener su casa propia; la patria es el joven que no estudia porque tiene que trabajar para ayudar en su hogar […]”.
¿Acaso no es esta una definición muy acotada del otro? Pensado en términos históricos, el otrx es quien le da fuerza al proyecto, quien lo ratifica. La cuestión es compleja y puede resultar engorrosa.
El filósofo José Pablo Feinman publicó hace exactamente dos años en Página 12 un texto sobre el marco ideológico de la frase LA PATRIA ES EL OTRO.
«Yo no soy yo. Existo en tanto diferencia. (…) al no ser mi presencia completud, totalidad autosuficiente, necesito del Otro, de su diferencia para establecer un yo, así como el Otro necesita de mí para ser él», escribió.
O sea, en un discurso uniforme del kirchnerismo la diferencia se ve exacerbada. La diferencia y la mirada del otro como afirmación del yo. Disculpen el vocabulario, pero esto me parece una cagada.
Mantengamos la compostura, che, que estamos haciendo periodismo en serio.
Recalculemos, volvamos a la entrevista vía mail con el sociólogo, citemos:
«La patria somos todos es otra manera de formular la cuestión pero que hacía claramente del todos a los argentinos, sin importar las diferencias. La patria es siempre un NOSOTROS, nunca el Otro, en tanto invención productora de un nosotros colectivo -que va más allá de la nación, el Estado, los intereses particulares.»
¿Qué dicen otrxs?
Puchero News salió a la calle para saber que entiende la gente cuando escucha “La Patria es el Otro”.
María tiene 19 años y es estudiante de Letras. Para ella, “la identidad de un país es un nosotros y no un yo”.
Un joven profesor de audiovisuales expresó que “colectivamente se construye la patria… pensando en el que tenemos al lado más que en el interés personal de cada uno”. Natalia (odontóloga, 49) coincide en tanto cree que tiene que ver con la solidaridad, con que hay que incluir al otro en la construcción de la patria.
Pero Lucas con sus 23 usaba palabras de sentido ambiguo: “Es una manera de invitar a la solidaridad nacionalista”. Y Guido, en una línea más crítica, señaló que la frase refiere también a la imposibilidad de “hacerse cargo de lo que hay que hacer para mejorar nuestra sociedad, siempre miramos al costado y la culpa es de otro”.
Cuando se piensa en la patria, se suele pensar en el vulnerado. Hacia allí pareciera tender la lucha. Pero también se debería pensar en quienes vulneran porque, nos guste o no, forman parte de lo que somos. O sea, reconocerse en quienes confirman nuestros ideales y en quienes los contradicen también. Tarea difícil.
¿Ética de la diferencia o marketing publicitario?
Feinman continuaba en su nota del 30 de junio de 2013:
“El tema del Otro refiere –en uno de los tantos abordajes de la cuestión– al pensamiento de Emmanuel Levinas. (…) Dentro de este marco conceptual (Levinas es un autor bastante oscuro) se inscribe la frase que CFK lanzó recientemente: “La patria es el otro”. Lo que dice ese concepto es que resulta imposible edificar una democracia (o una patria democrática) sin una ética de la alteridad que haga del Otro lo presente en mí, completándome.” Una ética de la diferencia, dice el artículo.
Y es cierto. La administración K ha recorrido miles de kilómetros en derecho con el matrimonio igualitario, la ley de fertilización, la ley de identidad. Pero en temas de aborto y políticas de drogas no se avanzó ni un milímetro.
De aquel discurso inaugural de esta consigna, pareciera que el Otro (de esta ética de la diferencia) es el compañero que históricamente ha sido excluido. Pareciera que la marca de época está inscripta a fuego.
“El kirchnerismo es marketinero como ningún otro gobierno en la historia argentina y en ese sentido se caracteriza por inventar un nombre para algo viejo pero que se quiere mostrar como novedad”, comentaba Fanlo en el intercambio virtual con Puchero News.
Foto del Twitter oficial de CFK
“Ya no estamos en la sociedad disciplinaria sino en la sociedad de consumidores, de control y del espectáculo. Entonces, venden el nuevo producto patriótico”, explicaba en su correo el sociólogo.
Antes fue el cine y los medios, ahora son la tecnología y las redes sociales las herramientas funcionales al sistema de cooptación -teniendo a la mismísima autoridad máxima del país como la reina de los tweets.
Para agregarle pimienta al asunto, estamos inmersos en un contexto de enemistad pro y anti K: “Te incluyo si te dejas incluir en las condiciones que te impongo, si no, quedas afuera. El populismo en general, y el peronismo en particular siempre tuvieron ese afán totalitario de la patria y la anti-patria”, escribió el profesor Fanlo.
La cuestión de la patria es compleja, sin duda, y no concierne sólo a políticos, filósofos y ciudadanos. También en la literatura encontramos varias referencias al tema, como en la Oda Escrita en 1966 de Borges:
«Nadie es patria, todos lo somos”.
Tal vez, los varios discursos en torno a la patria, al nosotros, al otro tengan más puntos de contacto de lo que pareciera, porque la diferencia que nos completa es también la diferencia ideológica.
Ilustraciones: Fulana Who
Leé la nota completa de José Pablo Feinman en Página 12, 30 junio 2013
Producción: Macarena Gagliardi Cordiviola